Maíz: con menores retenciones, mayor será el ingreso de divisas
Si se reduce al 10% la retención, podrían ingresar U$S 1.700 millones más, y sólo se dejarían de recaudar U$S 82 millones.
Según sostiene el especialista nacional en temas agropecuarios y consultor de empresas Pablo Andreani, la Argentina tendrá la oportunidad histórica, en 2016, de comenzar a recuperar su participación en el mercado mundial. Pero para ello harán falta definiciones claras de todos los candidatos que aspiran a la Presidencia de la Nación. De acuerdo a un ejemplo presentado por el especialista, un anuncio de baja o de quita en la retenciones de maíz al 10%, antes de las elecciones presidenciales, puede lograr revertir la baja en la intención de superficie de siembra de dicho cultivo. Y puede generar un aumento de la superficie de maíz de 1 millón de ha, mayor producción y saldos exportables de 10 millones de toneladas. Traducido en divisas, podrán ingresar U$S 1.700 millones adicionales y la recaudación por retenciones se reduciría sólo en U$S 82 millones.
Según indicó, de esta forma estaremos ante un círculo virtuoso; habrá mayores exportaciones, mayor ingreso de dólares y más recaudación por impuestos directos e indirectos, y lo mismo sucederá si se bajan o eliminan retenciones a los productos de las economías regionales y a cultivos como el girasol, la quinoa, el amaranto o la chía.
Si productores y Gobierno apuestan a un solo cultivo, la soja, entonces tendremos un problema mayor al no diversificar la matriz productiva y estar expuestos a un solo cultivo, donde el principal comprador e importador del mundo es China, país con serios problemas en su actividad económica y con nubarrones en su horizonte en el corto plazo, que podría afectar al precio internacional.
Según indicó Andreani, el atraso del tipo de cambio, el aumento del costo en dólares de bienes y servicios ajustados por inflación en pesos, junto con la fuerte baja que se ha producido en el precio de las materias primas agrícolas, está produciendo la quiebra del sector productivo y agroexportador.
La Argentina, granero del mundo durante los últimos 150 años, ha ido perdiendo participación en el comercio de alimentos a nivel mundial. La política de limitar o cerrar las exportaciones de alimentos puede llegar a justificarse si se tratara de un país sin capacidad para producirlos y sin posibilidad de generar saldos exportables. Pero la Argentina tiene recursos para satisfacer la demanda interna de su población y para generar saldos exportables y proveer de alimentos a 500 millones de habitantes.
Según indicó, de esta forma estaremos ante un círculo virtuoso; habrá mayores exportaciones, mayor ingreso de dólares y más recaudación por impuestos directos e indirectos, y lo mismo sucederá si se bajan o eliminan retenciones a los productos de las economías regionales y a cultivos como el girasol, la quinoa, el amaranto o la chía.
Si productores y Gobierno apuestan a un solo cultivo, la soja, entonces tendremos un problema mayor al no diversificar la matriz productiva y estar expuestos a un solo cultivo, donde el principal comprador e importador del mundo es China, país con serios problemas en su actividad económica y con nubarrones en su horizonte en el corto plazo, que podría afectar al precio internacional.
Según indicó Andreani, el atraso del tipo de cambio, el aumento del costo en dólares de bienes y servicios ajustados por inflación en pesos, junto con la fuerte baja que se ha producido en el precio de las materias primas agrícolas, está produciendo la quiebra del sector productivo y agroexportador.
La Argentina, granero del mundo durante los últimos 150 años, ha ido perdiendo participación en el comercio de alimentos a nivel mundial. La política de limitar o cerrar las exportaciones de alimentos puede llegar a justificarse si se tratara de un país sin capacidad para producirlos y sin posibilidad de generar saldos exportables. Pero la Argentina tiene recursos para satisfacer la demanda interna de su población y para generar saldos exportables y proveer de alimentos a 500 millones de habitantes.
Comentarios